Su
novela “El amor en los tiempos del cólera”, se basa en la historia de amor de
sus propios padres, que transcurre a finales del siglo XIX y comienzos del XX.-
Florentino
Ariza espera 53 años, 7 meses y 11 días a Fermina Daza, a la que considera el
amor de su vida.- El capitán del buque fluvial Nueva Fidelidad, en el viaje de
regreso por el río Magdalena, “miró
a Fermina Daza y vio en sus pestañas los primeros destellos de una escarcha
invernal. Luego miró a Florentino Ariza, su dominio invencible, su amor
impávido, y lo asustó la sospecha tardía de que es la vida, más que la muerte,
la que no tiene límites. –¿Y hasta cuándo cree usted que podemos seguir en este
ir y venir del carajo? –le preguntó. Florentino Ariza tenía la respuesta
preparada desde hacía cincuenta y tres años, siete meses y once días con sus
noches. Toda la vida —dijo.”
Ni la rudeza de
esa terrible enfermedad infecto contagiosa que es el cólera, pudo menguar la
vigencia de un sentimiento profundo, el amor, que supo atravesar los tiempos y
abrirse paso entre las adversidades, aunque tuviera que esperar 53 años, 7
meses y 11 días, o “toda la vida” al sentir de Florentino Ariza.-
La justicia, al
igual que el amor, representa también el costado noble de la naturaleza
humana.- Es una virtud, que al decir de Kelsen, “es aquello bajo cuya
protección puede florecer la ciencia, y junto con la ciencia, la verdad y la
sinceridad. Es la justicia de la libertad, la justicia de la paz, la justicia
de la democracia, la justicia de la tolerancia”.-
Y así como el
amor pudo esperar toda la vida, sobreponiéndose a la muerte que representa el
cólera, la justicia deberá saber
atravesar los obstáculos que representa la cólera, y seguir su camino, que es
largo y también acaba sólo cuando termina la vida misma.-
El costado
femenino del término no representa una
enfermad contagiosa, como su par masculino.- Es una emoción, que se expresa a
través del resentimiento, de la furia, de la irritabilidad.-
En los últimos
doce años de gobierno en la Argentina, se ha gobernado con cólera, es decir con
rabia, con ira, con enojo.- Se ha gobernado contra todos, contra todos los que
no aplauden incondicionalmente, no aprueban ciegamente, no adulan
persistentemente.-
Ese fue el
sentimiento gubernamental en todo este tiempo, la visión maniquea de la
sociedad, esa fractura social entre los buenos que somos “nosotros” y los malos
que son los “otros”, esa lectura adversarial de la política y confrontativa de
la vida.-
Aun cuando
algunos sectores se arrellanaron en la tibieza del regazo oficial, la mayoría
de los estamentos de la Justicia integró ese pedazo grande de sociedad que el
catecismo oficial decretaba que había que repudiar, someter, acorralar,
coléricamente.-
Pero como los
jueces deben cumplir una función sistémica, tuvieron y tienen la obligación
funcional y moral de atravesar indemnes la cólera gobernante.-
Esta obra intenta
reflejar, de modo general, la lucha perpetua entre el poder político, que
quiere invadir, y la Justicia que debe evitarlo.- Esa relación amor-odio, tal
vez describa la historia de los tiempos, tan vieja como la humanidad misma,
entre el filo de la espada y las pesas de la balanza.-
“La Justicia y el
Poder en tiempos de cólera”, intenta introducir una simbología metafórica de la
época, para que el juego de palabras se cuele por las rendijas ocultas de una
alegoría todavía crujiente.-
Seguramente, el
gobierno de los Kirchner no durará los 53 años, 7 meses y 11 días que el amor
de Florentino Ariza, menos aún toda la
vida.- Sucumbirá, bajo el peso de su
propia cólera, el 10 de diciembre de 2015,
a los 12 años, 6 meses y 15 días.-
EL AUTOR
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu opinión