EDAD PARA MATAR, EDAD PARA MORIR
“No es punible el
menor que no haya cumplido dieciséis (16) años de edad”
(Art. 1°, Ley N° 22.278)
Un
certero balazo en la cabeza terminó con la vida del joven Brian Aguinaco en 2016.- Su matador, un adolescente de 15 años
también de nombre Brian, fue liberado sin sanción alguna por el Juez, en virtud
que la ley penal determina la inimputabilidad
de los menores de 16 años.-
Dos
Brian, el uno, la víctima, terminó en la sepultura sin ninguna
consideración del sistema legal y
judicial.- El otro, el victimario,
el que hizo el disparo mortal, fue protegido por la ley y la justicia, y ahora
goza de libertad irrestricta.- El primero, ya no podrá hacer nada en la vida,
está muerto; el segundo, con la oportunidad que le dio el sistema, tal vez
vuelva a matar y a robar, tal vez no.-
Si
hay algo que siempre ha tentado a la demagogia
política, es la baja de la edad de
imputabilidad penal.- En 2009, un proyecto con media sanción del Senado,
que reducía a 14 años, no fue tratado por Diputados y cayó su estado
parlamentario.-
Con
el gobierno de Macri, vuelve a colocarse sobre el tapete la cuestión, y el
debate se ha reavivado con un tufillo
francamente electoralista.- Sin embargo, es un tema realmente importante desde el punto de vista social e
institucional, que merece un tratamiento por encima de banderías políticas.-
Si
hay algo que ha tentado a la demagogia, ese algo es la baja de la edad de imputabilidad penal
Apenas
se conoció la intención oficialista de sancionar un régimen penal juvenil, del
que carece nuestro país, y además de bajar el límite de la responsabilidad
penal de 16 a 14 años, se volvieron a escuchar las opiniones de distintos
sectores, con conceptos enlatados
desde hace mucho tiempo, puros estereotipos
que corresponden a una visión
estática de la sociedad.-